Sommelier Marcelo Pino

En dependencias del tradicional Hotel Chile España, el reconocido experto de la esfera vitivinícola nacional abrió las puertas de un espacio pionero donde se ofertarán más de 200 etiquetas, desde grandes producciones hasta vinos de autor. Todo entre una amplia gama de quesos franceses, carnes premium, aceites de oliva, charcutería y cristalería

“PREGÚNTELE AL BICAMPEÓN”, dice una singular gráfica para promocionar la recién inaugurada tienda de vinos del sommelier Marcelo Pino, en pleno centro de la capital mundial del surf, y principal destino costero de la región de O’Higgins. Y es así que lo llaman luego de haber sido elegido como el mejor de Chile en 2011, y también en 2014. Pero no sólo eso, detenta además ser el segundo mejor sommelier de Sudamérica 2015, y número 26 a nivel mundial.

Fiel a sus orígenes y convicciones marcadas por su particular esfuerzo y tesón, eligió a su tierra natal, Pichilemu, para cimentar lo que hoy reconoce como uno de sus más grandes proyectos de vida. “Muchos me decían: ‘pero cómo!, Pichilemu?’, sin embargo estoy convencido que va a funcionar. Siento que aquí hay de todo para hacer grandes cosas, está creciendo mucho y me gusta todo lo que está pasando. Soy de acá y quiero plasmar esto donde está mi gente. Por eso quiero que lo disfruten tanto los pichileminos como los turistas”, dijo el sommelier, quien también es amante del surf.

La “Tienda de Vinos Marcelo Pino Sommelier” está ubicada en el antiguo Hotel Chile España, una casona de adobe con más de 100 años, un espacio al que se le ha sacado partido. “Había que aprovechar la infraestructura, y en especial la temperatura que otorga el adobe, sobre todo a los vinos”, indicó el especialista. Fue un arduo trabajo de reconstrucción a cargo de los arquitectos Rodrigo Carrión y Marcela Silva, y que duró casi un año dado que el lugar aún presentaba los efectos del terremoto de 2010. “Se utilizó mucha técnica antigua, igual como se trabajaba ancestralmente el barro”, agregó Pino.

Periodistas invitados (as) a la apertura de la tienda en Pichilemu

Roberto Córdova alcalde de Pichilemu, felicita a Marcelo Pino por su emprendimiento en la ciudad

El proyecto contempla llegar a ofertar 230 etiquetas de vino, desde producciones de grandes viñas nacionales hasta pequeñas apuestas de vinos de autor. Como complemento una especial selección de copas, vasos wiskeros, decantadores, quesos franceses, charcutería española, carnes premium, aceites de oliva, entre otros productos gastronómicos. “Lo que hay en la tienda es todo lo que a mí me gusta, que generalmente no encontraba en Pichilemu. Cosas entretenidas que de verdad hacían mucha falta en la zona y desde ahora están”, señaló Marcelo.

A partir de marzo de 2017, el destacado sommelier chileno realizará diferentes actividades en torno a la tienda, como una forma de crear un nuevo y entretenido ambiente para el público local y turista, “vamos a enseñar cómo tomar la copa, el descorche, cuánto servir, los sabores y aromas del vino. También haremos degustaciones temáticas: clima frío, vinos de cordillera, de la costa, entre otras. También incluiremos cervezas, aceites de oliva, aguas y mucho más”.

Quién visite la nueva tienda de vinos en Pichilemu no sólo podrá comprar todo lo que encuentre en ella, también podrá disfrutar en su pequeña terraza una copa de vino y una selección de quesos franceses, pues además cuenta con servicio de restaurant.

CAVA DE VINOS DE ADRIANA

En el patio interior del Hotel Chile España, y como parte de la apuesta general de la tienda, Marcelo Pino habilitó una bodega subterránea para dar vida a la “Cava de Vinos de Adriana”, un espacio también centenario donde resaltan vigas originales hechas con azuela. En ella se albergan vinos franceses únicos en el mundo, Gran Cru y Premier Cru de la Borgoña, con un valor altísimo y de añadas muy antiguas correspondientes a la colección privada de la destacada empresaria María Adriana Padilla. “Ella era dueña del hotel y sus herederos son amigos míos. Su esposo Antonio junto a sus hijos Cristian Merello y Maricel Merello, son quienes me dieron la oportunidad de plasmar mi proyecto en este lugar maravilloso”, contó el sommelier. La cava de vinos posee además un espacio para reuniones exclusivas y se puede conocer mediante una visita guiada, haciendo de ésta una verdadera experiencia para el turista.

“Creo que es un tesoro en la región, desde que vi el espacio para la tienda, de inmediato pensé en transformar este sector en una cava de vinos. Siento que toda marca debe tener una historia detrás, y lo bueno es que la que existe aquí no es forzada ni inventada, es la verdad. Tuve la suerte de trabajar con Adriana muchas veces como garzón, y siempre supe que era una mujer muy apasionada por el vino y sus clientes. Acá está materializado su tesoro”, indicó Marcelo Pino.

EL ESPERADO ESTRENO

A la ceremonia de inauguración asistieron destacadas autoridades locales lideradas por el edil de Pichilemu, Roberto Córdova, representantes del mundo del vino nacional, sommeliers profesionales, críticos gastronómicos, prensa especializada e invitados especiales, más el círculo familiar de Marcelo Pino.

Mario Pablo Silva, propietario de Viña Casa Silva y presidente de Vinos de Chile, señaló en la oportunidad que “los testimonios de vida como el suyo sirven para su generación y para muchos de nosotros, también para las venideras que aprenderán que con esfuerzo, trabajo, honestidad y dedicación, todo se puede lograr”.

En tanto Roberto Córdova, alcalde de Pichilemu, expresó: “Estamos orgullosos del proyecto de Marcelo Pino, de cómo ha colaborado con nuestra comuna en el sentido de darla a conocer, no sólo a nivel nacional sino también en el mundo. Si a él le va bien a la comuna le va a ir bien, y seguirá difundiéndose la marca Pichilemu”.

Al final el sommelier agradeció a los representantes del grupo San Pedro Tarapacá por el apoyo a su proyecto, y de manera especial a Viña Casa Silva, bodega donde lleva siete años como embajador de sus vinos. “La tienda es un aporte, una apuesta que aquí no existía. Ahora la gente de todos los niveles sociales podrá comprar una botella de vino, de los 4 mil a más de 100 mil pesos. La idea es acercar el vino a la comunidad, educar a través del vino. Es el inicio de muchas cosas entretenidas que vienen para Pichilemu”, concluyó Marcelo Pino.